Vivimos en un mundo de grandes cambios; la rapidez de los acontecimientos, así como la ingente cantidad de información a la que tenemos acceso, provoca que seamos incapaces de gestionarla lo que, al final, significa que se desarrollen a nuestro alrededor una serie de sucesos que escapan a nuestro escrutinio y, por tanto, a nuestro control. En principio, esto no sería preocupante si esas dinámicas no estuviesen encaminadas a socavar los cimientos de las sociedades democráticas y a recortar nuestras libertades personales. Este trabajo es un intento por identificar una manera de proceder que viene de siglos atrás, una especie de plan maestro de largo recorrido basado en crear estructuras de poder, Think Tanks, y de desnaturalizar organismos públicos con la intención de controlar y redirigir el correcto devenir de los sistemas democráticos, es decir, menoscabar la voluntad popular ocultando el verdadero objetivo de estas acciones, que no sería otro que el de instaurar el Nuevo Orden Mundial, Un sistema político elitista creado para favorecer a una minoría a costa del bienestar de la mayoría.