insultos y animadversión entre españoles
Si no cerramos los ojos a la dura realidad, la animadversión entre españoles, es decir, la ojeriza, la enemistad, viene de lejos. Ya el viajero Bartolomé Joly, en 1604, se sorprendió del fuerte localismo que existía en los ánimos de los valencianos, aragoneses, vizcaínos, catalanes ...