La vida de José Álvarez de Toledo habría servido no sola para componer una interesantísima novela, sino varias. Pero de haberlo hecho así, siempre le hubiese quedado la duda al lector, de si se encontraba ante un personaje real o ficticio, por eso nosotros hemos preferido la aridez de los documentos y el rigor de los datos. Su tenacidad como representante carlista en Nápoles, nos llevó a descubrir un personaje complejo y con una peripecia personal, que pensamos configura casi un retrato completo del siglo XIX español. Un personaje que estaba oculto en las parciales notas biográficas que de él habían circulado, basadas exclusivamente en su Expediente Personal, obrante en el Archivo General Militar de Segovia y en la reseña que acompaña a su retrato oficial, publicado en la obra de Pedro Chamorro Baquerizo, Estado Mayor General del Ejército Español, docuementos ambos redactados con su asesoramiento y en los que se silencian los hechos más "llamativos" de sus andanzas, como por ejemplo, el haber sido miembro activo de la legia de los Caballeros Racionales; autor de las primeras proclamas separatistas de Cuba y Santo Domingo; agente del presidente de los Estados Unidos de América del Norte, James Madison; introductor de la primera imprenta en Tejas e impresor de sus primeros periódicos; general en jefe del tejano Ejército Republicano del Norte; informador luego de nuestro embajador en Washington, Luis de Onís y analista preciso de la situación de la América Española.