Rutas Ancestrales de Seda y Arena revela un cúmulo de experiencias vividas, tanto exógenas como endógenas, a través de casi media vida viajando por Asia y África, y cuyo motivo inicial, fue un acontecimiento trascendental que marcó un hito entre quién fui y la persona que soy ahora. Me convertí en esa buscadora capaz de aventurarse a viajar sola por primera vez, venciendo sus miedos, sin llevar ningún tipo de garantías, seguridad ni apoyo previo, arriesgándose a experimentar los sabores de una existencia completamente diferente, trazada paso a paso por mí misma y guiada por mi intuición. Para ese entonces, no hablaba nada de turco, -sólo un inglés medio-, no poseía bienes de fortuna que me respaldaran, y sólo contaba con mi decisión firme de querer transitar por una nueva senda de aprendizaje, emociones y aventuras que le dieran un vuelco positivo a mis días.