En muchas ocasiones vemos frustradas nuestras expectativas por no haber seleccionado adecuadamente el material probatorio en que apoyarnos. Es sabido que en el mundo de los tribunales sólo existe y se valora aquello que puede probarse. El corolario de este es: la Justicia no recae sobre la verdad material, como mucho sobre la verdad formal; es decir, lo que puede probarse aunque no se llegue a conocer nunca la realidad de lo verdaderamente sucedido.

Para ello hemos centrado nuestra atención en los procedimientos más comunes en todos los despachos, entendiendo que muchos de nosotros, por circunstancias, a veces, nos vemos obligados por distintos motivos -familiares, amistades, etc.- a hacernos cargo de asuntos de los que no somos especialistas. Con este manual tratamos de ayudar a que el resultado sea menos incierto, e incluso, a alcanzar el éxito total del mismo.

Desde el principio la sistemática del libro es la misma, se trata de conocer la legislación aplicable al supuesto tratado, un breve resumen del procedimiento aplicable, aderezado con un esquema procesal y, como piedra angular, algunas sentencias dictadas al efecto, estimando o desestimando la pretención, con especial relevancia sobre qué pruebas han sido necesarias para tomar una u otra decisión.