La que ha venido ha conocerse como Ley de Grandes Ciudades supone una reforma en profundidad de la organización pública en los municipios españoles de mayor población, estableciendo un sistema organizativo especial, que se caracteriza por la flexibilidad, la modernización de las instituciones existentes y la creación de nuevos órganos, acorde todo ello a la misión que tiene encomendada de gestionar las enormes cantidades de recursos y servicios de los que son responsables. Pero, a pesar de lo que pudiera pensarse, la conocida popularmente como Ley de Grandes Ciudades, no solo afecta a municipios de gran población. Antes al contrario, establece importantes refromas extensibles a todos los entes locales, tales como la mejora de los instrumentos de participación vecinal, del régimen sancionador y de la organización municipal destinada a la gestión de servicios públicos. A lolargo de esta obra monográfica, se realiza un análisis pormenorizado de las modificaciones más importantes llevadas a cabo en la regulación de los entes locales, prestando una atención prioritaria a las peculiaridades propias de la organización en el ámbito autonómico canario.