Comienza el año de 1936 y las elecciones generales convocadas para el 15 de febrero marcan la vida española. Básicamente los diferentes partidos se reagrupan en dos bloques, uno de las izquierdas, que se denomina Frente Popular y otro de las derechas, que denominan Bloque Nacional.

Llega el día de las votaciones y los resultados dan como vencedor al Frente Popular de las izquierdas, iniciándose una nueva etapa política después del periodo de gobierno de las derechas de los años 34 y 35.

Los resultados son democrática y aparentemente aceptados por todos, pero la realidad es que importantes elementos y grupos de las derechas empiezan a confabular contra el gobierno, que quiere mantener la confianza en la democracia, desatendiendo los cada vez más intensos rumores.

Los actos violentos en las calles aumentan mientras determinados núcleos militares comienzan a organizar un “golpe militar”.

Tras los atentados del 12 y 13 de julio, en los que son asesinados el teniente de la guardia de asalto Castillo y el líder de las derechas Calvo Sotelo, los preparativos de la asonada se precipitan y el 17-18 de julio se inician sus movimientos armados. La guerra civil ha comenzado.

Mientras, el quince de julio Manuel Machado, por motivos personales, viaja a Burgos, donde se ve atrapado por los acontecimientos militares. El resto de la familia permanece en Madrid. La incomunicación y separación familiar durará toda la guerra. Manuel permanece en la ciudad castellana, el resto de la familia siguiendo el camino de Antonio Machado: Madrid, Valencia, Rocafort, Barcelona y exilio en Francia.

En estos dos años, 37 y 38, Antonio colabora con sus escritos de forma intensa y comprometida con la República. El 27 de enero de 1939 cruza la frontera y muere el 22 de febrero de 1939 en el pequeño pueblo francés de Collioure.