Horizontes fue durante la mayor parte del siglo XX la más famosa pintura colombiana. ¿Qué aspecto de su ingenuidad es el que hoy más nos conmueve? ¿Quizás la evocación de la mano de Adán en el cielo raso de la Capilla Sixtina? ¿La indefensión iconográfica en la construcción de su Sagrada Familia? ¿El pasado porvenir de su esperanza que, como contenido especulativo suplementario, Francisco Antonio Cano le daba en 1913 a su sociedad? Desconcierta en cambio que hasta hace apenas un cuarto de siglo se continuaba festejando Horizontes ingenuamente como autentico icono identitario. La violencia que se vivía no alteraba la imagen del pasado que se quería ver en él.

El reciente devenir ha cambiado la imagen de la historia latinoamericana y Colombia analizada en este libro. Diecisiete especialistas reexaminan, a la luz de la relación Conmemoraciones y Crisis, las potencialidades de la memoria de lo acaecido a los dos lados del Atlántico, antes y después de Boyacá y Ayacucho, sabiendo que lo opuesto de olvido no es el recuerdo sino la justicia.