La historiografía actual entabla un duro combate para desmontar la mentira con que la leyenda negra antiespañola ha envenenado el mundo, y especialmente España, durante cinco largos siglos. Dicha leyenda negra es esencialmente anticatólica debido a que España se convirtió en la punta de lanza del catolicismo, a nivel doctrinal, cultural, político y militar, durante el siglo XVI contra el protestantismo y el islam. La verdad de la investigación histórica no ha llegado al pueblo a causa de la manipulación de pseudohistoriadores ideologizados, cuyas tesis, faltas de rigor científico, han popularizado la clase política, los medios de adoctrinamiento de masas y la enseñanza.

Sin embargo, aunque se va consolidando un movimiento de respuesta en el campo de la historiografía civil, lamentablemente no ocurre lo mismo en el ámbito eclesial. La campaña de difamación sistemática con la que está siendo acosada la Iglesia Católica incluye la denigración de su historia, presentada como un cúmulo de fanatismo irracional, de violencia intelectual y física contra sus opositores.

La obra que tiene entre sus manos se propone desenmascarar y rebatir, de un modo divulgativo y accesible, las raíces históricas del anticatolicismo actual y por extensión antiespañol. La Edad Media, las Cruzadas, el Islam, la Inquisición y expulsión de los judíos, la conquista y evangelización de América, la Ilustración y su proyección en la Revolución Francesa y la relación con el nazismo nunca han sido contados de este modo por la Iglesia actual.