El desarrollo de las áreas rurales de interior presenta deficiencias ligadas a la crisis de modelos agropecuarios, reflejándose sus efectos negativos en los recursos territoriales, la demografía y la economía. Actualmente, una parte de los habitantes de esos espacios de interior intenta desde
hace años aprovechar las nuevas tendencias sociales y económicas ligadas a la actividad turística y los servicios, que se desarrollan en el marco de una sociedad más globalizada. En este sentido, las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TIC) se han convertido en un elemento clave para dinamizar los destinos turísticos, puesto que son un factor de competitividad fundamental al facilitar la toma de decisiones estratégicas y posibilitar la creación de nuevos modelos de negocio. No obstante, también resulta evidente que las iniciativas turísticas están necesitadas de metodologías, que adecuándose a las características de los diferentes territorios y a los nuevos modelos de desarrollo, se puedan erigir como un motor de transformación social de las áreas rurales. Los trabajos recogidos en el presente libro plantean modelos, teorías y experiencias de territorios que ponen énfasis en los diferentes aspectos necesarios para acometer con ciertas garantías la conversión de áreas rurales en espacios turísticos demandados.