El conflicto crónico que sucede a la ruptura parental y el relitigio, compromete seriamente el interés prevalente de niños, niñas y adolescentes. Desde este enfoque, nuestro estudio analiza el modelo “español” de custodia de los hijos y las complejas cuestiones conexas que le acompañan. Partiendo de la diversidad de regulaciones autonómicas, y de las deficiencias de la regulación estatal, se formulan al respecto propuestas de lege ferenda que pueden sentar las bases para el funcionamiento eficaz de un modelo común, en el que la coparentalidad y el mantenimiento de las responsabilidades parentales compartidas, garanticen la igualdad de los progenitores y el bienestar de la infancia. Lo que requiere un compromiso mayor y una importante tarea de cooperación de los sujetos implicados para normalizar las relaciones parentales y lograr acuerdos sin que las emociones, sentimientos o resentimientos lo impidan. En esta línea y con objeto de propiciar un sistema en el que prime no tanto la cantidad, como la calidad de las relaciones paternofiliales, se analizan, con anotaciones de Derecho comparado, los beneficios del plan de coparentalidad, y damos cuenta del estado actual de la mediación y la incipiente implementación de la coordinación de parentalidad. Recursos legales y nuevos mecanismos de ADR que devienen inaplazables e imprescindibles al objeto de preservar a la infancia del conflicto parental y fomentar la parentalidad positiva tras la ruptura.