El agua es un recurso imprescindible para la vida, que por su propia naturaleza se filtra, evapora, discurre hacia el mar, evidenciando a través de su transformación y movimiento un ciclo dinámico de carácter integrado. En todo momento y lugar el agua cumple la misión de multiplicar la vida, refrescar el ambiente, esculpir el mundo y acarrear nutrientes. La importancia que para la vida y el medio ambiente tiene este recurso natural justifica, sin mayores explicaciones, el impacto social y económico de su normativa reguladora y el lugar de privilegio que ocupa en los programas políticos. De forma que el interesado por las opciones que los partidos políticos ofrecen sobre el tema, puede advertir, a poco que reflexione, que el agua se ha llegado a convertir en un mercado de futuro de votos. La monografía que se ofrece entre estas tapas, parte de una perspectiva diferente, pues se ha escrito desde criterios técnicos y pensando en una meta temporal más remota a la que ofrecen las próximas elecciones. Se parte de la estrategia diseñada por la Unión Europea sobre la conservación y el uso del agua para ofrecer una visión de conjunto que permita distribuir su regulación y gestión entre las Administraciones y entidades hidráulicas internas; analizando, al tiempo, los distintos regimenes de aguas continentales, la regulación de las obras hidráulicas y el régimen económico financiero de las aguas. Finalmente, se hacen algunas reflexiones de futuro sobre el sector hídrico.