"El interés que todo el conjunto de la nación, cada una de sus provincias en particular, y señaladamente esa Corte, ha tomado por los sucesos de esta ciudad, hace tiempo que clama por un escrito que reúna en sí lo más principal e interesante con verdad, claridad y precisión. Sabemos se han extendido varios papeles, cartas y relaciones que, o bien se han ceñido a alguna acción particular, o bien, abrazando algunas más, no forman con todo eso un todo de historia que enlace y comprenda desde sus principios, por un orden cronológico, todos los sucesos desde la entrada de nuestros detestables y realmente caros aliados y amigos hasta su huida vergonzosa. Es verdad que el pormenor de todo lo ocurrido en el sitio de esta ciudad exige una historia completa, ya por el singular denuedo de los naturales habitantes, ya por lo heroico de algunas acciones parciales, y ya por las varias circunstancias que se mezclaron con ellas, que colocan a esta capital entre las más famosas ciudades de la historia antigua y moderna, nacionales y extranjeras que han sufrido sitios semejantes. […] Esta idea, que en el tiempo mismo de nuestras desgracias pasó repetidas veces por mi imaginación, la comuniqué a un amigo mío, capaz de desempeñarla felizmente, en el instante que nos vimos libres de las infernales tropas, que por espacio de dos meses justos nos han hecho sufrir lo que no se puede expresar".