El libro pretende dar a conocer con cierta profundidad los debates y aproximaciones sobre la política exterior y de seguridad de Estados Unidos, en la última década, intentando desentrañar las políticas mantenidas por las dos Administraciones del presidente Barack Obama, sus fundamentos, en no pocas ocasiones poco convincentes, sus cambios y sus realizaciones, buscando después explicar las transformaciones inducidas por la nueva presidencia de Donald Trump, un auténtico terremoto en algunas aproximaciones que necesariamente tenían que cambiar, en función del notable fracaso de algunas de las políticas desarrolladas por la Administración Obama, caso del "Pivot to Asia" y la política de re-equilibrio, así como la política mantenida con Corea del Norte, o en función de nuevas aproximaciones ideológicas, caso, por ejemplo, de la nueva aproximación a Europa y a los temas de medioambiente, o también en función de planteamientos que se consideran más adecuados a lo que ocurre sobre el terreno en ciertas áreas regionales, y los intereses del "America First" y las nuevas oportunidades que parecían presentarse, en el caso de Oriente Medio. Así como también llama la atención el escaso interés todavía manifestado por la Administración Trump por África, dejando de lado la lucha contra el terrorismo, y América Latina en su conjunto, excluyendo el tema migratorio, ante la fuerte y creciente implantación de China en ambos continentes, con unas políticas y reglas de funcionamiento independientes, al margen de los ordenamientos hasta ahora mantenidos, y que tienden a desplazar la presencia e influencia de Estados Unidos o implantarse en su "patio trasero", caso de América Central.