El libro debe entenderse como una aproximación académica a los problemas de la financiación autonómica, hecha por un conjunto de profesores de universidad con el único objetivo de aportar materiales de reflexión a quienes deben ser los protagonistas del proceso de reforma de la financiación autonómica; reforma cuya oportunidad pocos niegan hoy. Los doce capítulos que conforman el libro se estructuran en cuatro bloques. En el primero, se analiza la situación actual desde una perspectiva general y se motiva la necesidad de una reforma. Un segundo bloque de trabajos arroja luz sobre los tres fundamentos básicos de un sistema de financiación descentralizado: la estimación de las necesidades de gasto, el poder tributario que se descentraliza y el sistema de transferencias corrector de desequilibrios verticales y horizontales en capacidades financieras. El tercer bloque de trabajos engloba las políticas de gasto más relevantes cuantitativa y cualitativamente: sanidad, educación y servicios sociales. El sistema actual integra la financiación de estos servicios dentro de la financiación general, y es poco probable que esta situación vaya a ser alterada en este sentido. El último bloque integra una serie de trabajos que desarrollan cuatro cuestiones clave para el cierre del modelo financiero de las Comunidades Autónomas de régimen común: gestión tributaria, convivencia entre sistema común y foral, estabilidad presupuestaria y endeudamiento autonómico, y política regional e inversiones estatales