Historia espectral defiende un enfoque deconstructivo de la práctica y la escritura de la historia en un momento en que las formas disponibles para escribir y publicar historia están sufriendo una transformación radical. Para ello, explora el legado y el impacto de la deconstrucción en el trabajo historiográfico estadounidense; la actual fetichización de la experiencia vivida, reforzado por un materialismo de lo "real"; las nuevas tendencias en la filosofía de la historia; y la persistencia del realismo ontológico como pensamiento dominante en la práctica convencional de la disciplina.

Argumentando que el realismo ontológico se ve reforzado por las actuales prácticas editoriales analógicas, Ethan Kleinberg aboga por un enfoque espectral de la historia que, siguiendo la obra de Jacques Derrida, abra a una comprensión del pasado presente y ausente a la vez, en lugar de aquella otra representación convencional que lo enseña como una instantánea fija y estática de un momento en el tiempo. Esta comprensión polisémica del pasado como algo múltiple y conflictivo, es lo que hace que el enfoque deconstructivo del pasado sea especialmente adecuado para las nuevas formas digitales de escritura y presentación histórica.