El sometimiento de los Estados de democracia liberal al siempre creciente poder de la Unión Europea (UE) ha dado como resultado un sistema de tipo imperial en el que las élites políticas nacionales han aceptado la condición de vasallos a cambio de cierta protección, y en el que los pueblos ya no disponen ni de la soberanía política, ni del control sobre la acción de los gobernantes, ni de la libertad que antes disfrutaban.

Fernando Nolla analiza desde sus orígenes las características y fundamentos del europeísmo y los resultados reales que éste ha producido, y para ello recorre con especial detenimiento y gran aporte de información las políticas que promueve e impone la UE alegando criterios sentimentales y valores humanitarios. Este recorrido va dibujando con precisión el despliegue de una ideología utópica, dogmática e intervencionista que, al ponerse en práctica desde un poder apenas controlable, está dando como resultado ingeniería social a gran escala, acoso a la libertad de expresión y la subordinación de la justicia a la política imperial.