las otras vidas del cadáver
Nuestros cuerpos son la prueba irrefutable de nuestra existencia. Es por ello que, cuando fallecemos, lo único que perdura, aunque temporalmente, son nuestros restos, nuestras carcasas. Rastros matéricos de nuestra existencia que producen efectos confusos de repulsa y fascinación. La humanidad, a lo largo de ...