La homogeneidad o heterogeneidad de la norma lingüística del español es una cuestión continuamente debatida y en la que no existen verdades absolutas, sino puntos de vista diferentes. Con todo, sean una o varias las normas a seguir, el español presenta diversos centros de irradiación normativa, en torno a los cuales se estructuran sus propias periferias, aquellas variedades que alteran dicha norma por múltiples causas.

Estas periferias pueden modificar los parámetros normativos para adaptarse a un nuevo medio geográfico, a una situación de contacto lingüístico, o a un grupo social con necesidades comunicativas diferenciadas. La consecuencia es que las particularidades del habla propia de los centros de irradiación son consideradas como regulares y exentas de marca definitoria, mientras que las propias de las áreas periféricas, quedan marcadas como irregulares.

A lo largo de la presente obra, hemos pretendido recoger estudios que muestren dicha diversidad; en sus páginas encontraremos trabajos que reflejan, con profundidad y relevancia, aspectos clave de la evolución dialectal, histórica y sociolingüística de la lengua española, unos partiendo de las variedades propias de los centros normativos, otros de las periferias de la lengua.