Esta obra constituye una verdadera revelación de una figura menospreciada durante doscientos años por la historiografía española, la de la tercera esposa de Fernando VII, María Josefa Amalia de Sajonia. En esta aparente "novela epistolar", la joven reina se nos muestra muy alejada de la imagen de beata reaccionaria, sumisa e insignificante con la que, de manera interesada, suele ser etiquetada, para ofrecernos aspectos íntimos de su vida familiar y política en el período de 1821-1822. La primera reina constitucional se nos aparece como una verdadera intelectual, culta y refinada observadora de su época, en cinco cartas aparentemente dirigidas a su hermana María Fernanda de Sajonia, sobre cuya verdadera autoría los más relevantes historiadores del momento están sosteniendo una fructífera polémica. Dos siglos desde su edición por entregas, las Cartas de la reina Witinia siguen siendo un misterioso enigma sobre los propósitos últimos de su autora, y nos permiten vernos reflejados en muchas ocasiones como nación en sus ácidas y tristes reflexiones.