El Espacio Europeo de Libertad, Seguridad y Justicia, última gran frontera competencial adquirida por la Unión, alcanza su madurez con la entrada en vigor del Tratado de Lisboa, que hace de él y de las políticas necesarias para desarrollarlo una competencia compartida de la Unión, además de establecer un marco jurídico claro tras poner fin a su artificiosa división en pilares.Esta obra colectiva analiza el estado actual de la cooperación judicial penal, deteniéndose en los últimos instrumentos adoptados en esta materia ante la proximidad del nuevo escenario de Lisboa así como en los retos que con él se abren y en los primeros pasos dados para hacerles frente. Las implicaciones del nuevo Tratado en la cooperación judicial penal{ la creación de una Fiscalía Europea a partir de Eurojust{ el propio papel de Eurojust y el reforzamiento de sus poderes{ la Decisión Prüm y la obtención, registro e intercambio de perfiles de ADN{ las Decisiones marco sobre decomiso, sobre reconocimiento de resoluciones que imponen sanciones pecuniarias, sobre ne bis in idem y conflictos de jurisdicción, sobre reconocimiento de medidas cautelares no privativas de libertad y sobre reconocimiento de resoluciones judiciales relativas a la suspensión y sustitución de la pena privativa de libertad o la libertad condicional, y la iniciativa de Directiva sobre interpretación y traducción en el proceso penal son abordados desde una perspectiva multidisciplinar